Debido a que la usamos con frecuencia, consideramos importante hablar de algunas molestias que puede sentir mientras está en tratamiento con ella.
Cada cuánto tiempo y cuántos días dura
Esta combinación de medicamentos se administra por lo general cada dos semanas. Usted tendrá que asistir a la sala de quimioterapia tres días. El primer día se le administrarán medicamentos para evitar la náusea, el oxaliplatino, el ácido folínico, y se le conectará el infusor para las primeras 22 o 24 horas de infusión. El segundo día se le administrará otra dosis de ácido folínico y se volverá a llenar el infusor, que nuevamente se llevará a casa por otras 24 horas. El tercer día se le retirará la venoclisis y se le recogerá el infusor.
La infusión contínua
El fluorouracilo, en esta combinación, se administra en forma contínua, gota a gota, durante 48 horas. No se preocupe, no es necesario que esté internado(a) todo ese tiempo. Existen unos infusores portátiles que le administrarán la dosis adecuada a la velocidad adecuada aunque usted esté en casa y haga sus actividades diarias. Naturalmente, será necesario tener algunas precauciones para evitar que el catéter se salga de la vena, sobre todo si se está administrando la infusión por una vena periférica (de un antebrazo, por ejemplo), pero la mayor parte de las actividades de la vida diaria las podrá realizar. Es más cómodo administrar estas infusiones a través de un catéter central, o de un acceso venoso permanente, pero éste requiere de ser colocado en quirófano. Pregúnteme (o pregúntele a su oncólogo) sobre la conveniencia de colocarle un acceso venoso permanente en su caso.
El infusor es un aparato pequeño, y se le facilitará una bolsa especial para que lo lleve ahí. Esta bolsa puede colgársela al hombro, fijarla a su cinturón a través de una presilla que tiene incorporada, o bien meterla a la bolsa de su saco.
Consecuencias en las venas de la infusión contínua
Como muchos de los medicamentos que usamos en Oncología, el fluorouracilo en infusión contínua puede irritar un poco las venas en las que se administra. Sin embargo, la mayor parte de las veces solo notará que la piel sobre el trayecto de las venas de su antebrazo adquiere una pigmentación oscura, que no duele ni molesta en absoluto. Esta coloración es pasajera. En pocos casos habrá alguna molestia en la vena. Rara vez, si se fuga un poco del medicamento, se irritará el tejido debajo de la piel, que se inflamará un poco.
Náusea, vómito
Si no se le administrara ningún medicamento para evitarlas, presentaría mucha nausea y vómito. Sin embargo, raramente vemos que alguien presente alguna de estas molestias gracias a los medicamentos antieméticos que usamos. Si usted llegara a presentar náusea o vómito, puede seguir las recomendaciones que damos en general para estos síntomas, excepto que no recomendamos la ingesta de líquidos fríos cuando usamos oxaliplatino, debido a que puede producirse una sensación muy desagradable en la garganta, como explicamos abajo. Para tener más información sobre qué hacer en caso de presentar náusea y vómito, por favor, lea el folleto correspondiente.
¡Cuidado con el frío!
Las personas que reciben oxaliplatino, que es uno de los medicamentos que forman parte de esta combinación, presentan un efecto colateral que es muy particular de este medicamento, y consiste en sentir algo parecido a calambres al contacto con algún objeto frío, especialmente los primeros días después de recibir el medicamento. En esos días, si toman algún líquido frío, tienen una sensación muy desagradable en la garganta: un calambre que en algunos casos los hace pensar que “se les está cerrando la garganta”. Está comprobado que solo es la sensación desagradable, y que no hay riesgo de asfixiarse. Sin embargo, la sensación es tan desagradable, que recomendamos no tomar líquios fríos si se recibe oxaliplatino como parte del tratamiento anticanceroso.
Estas molestias se deben a que el oxaliplatino afecta temporalmente los nervios sensitivos.
Conviene que esté consciente que también puede haber sensaciones desagradables en la mano al tomar el vaso con agua helada, en las partes expuestas del cuerpo si hace mucho frió o si se coloca donde sopla el aire acondicionado, etc.
Otros efectos en los nervios sensitivos
Además de las molestias pasajeras al contacto con el frío o con objetos fríos (incluyendo la ingesta de líquidos fríos, como se mencionó arriba), también puede haber, tras varios meses de tratamiento, alteración en la sensibilidad de las yemas de los dedos, que se sienten “dormidas” inicialmente, y luego “pican” al hacer un poco de presión. Estas molestias pueden llegar a afectar el desempeño de algunas actividades cotidianas, como abotonarse, desabotonarse y escribir. No debemos permitir que la alteración sensitiva llegue a ser tan seria, a menos que realmente la ventaja de continuar con el tratamiento sea muy grande, pues este efecto tarda en revertir y puede no volver a la normalidad.
Con éste no se cae el pelo
Uno de los efectos colaterales que a muchos enfermos les parece más desagradable de los tratamientos de quimioterapia es la caída del pelo. Ninguno de los medicamentos en esta combinación suele causar caída de pelo en forma que sea notable, por lo que no debe preocuparse por este cambio en la apariencia personal.
Otros efectos colaterales
Con esta combinación de medicamentos se pueden presentar los efectos comunes para la mayoría de los tratamientos oncológicos, como fatiga, diarrea, disminución temporal de la producción de glóbulos blancos y otros.